Jack Sosa conoce el mundo de la violencia, el sexo y el peligro. Él creció en ese mundo y como hombre, lo posee. Entonces, un día, mientras espera que sus chicos de limpieza se deshagan de un cuerpo, una niña gordita se sienta con él, tratando de hacerlo sentir mejor. Él es un extraño y ella solo una niña, pero cuando ella se va, se lleva una parte de él con ella.
Jack no puede dejar ir a este ángel, así que la mantiene, decidido a protegerla. Ahora, cuatro años después, ya no es una niña, sino la mujer hermosa, y los sentimientos de Jack también han cambiado, convirtiéndose en algo mucho más allá de la protección. Él no puede esconderlos por mucho más tiempo.
Pipper se ha enamorado del hombre que la salvó, pero ella nunca esperaría que Jack se sienta de la misma manera. Sin embargo, un beso es todo lo que necesita. A pesar de que Jack es veinticuatro años mayor que ella, a ella no le importa. Él es el hombre del que se enamoró, el hombre que hace que su cuerpo se caliente más que cualquier otro fuego.
Sin embargo, Piper no sabe la verdad obre el hombre que ama y cuando su enemigo la toma, su mundo se pone al revés ¿puede encontrar en su corazón el modo de amar a un asesino? ¿Puede Jack vivir con la culpa de ser responsable de perder a su ángel virginal?
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