Mateo
Estoy aquí para hacer un trabajo. Robar el jarrón y largarme. Fácil. Al menos lo habría sido si no hubiera presenciado un secuestro y hubiera decidido intervenir para ayudar. Es entonces cuando conozco a Milly... Y también cuando me doy cuenta de que estoy en un mundo de problemas.
Milly
Estoy acostumbrada a los hombres malos. De hecho, fui criada por uno. Pero cuando Mateo me dice que es un mal tipo, no puede creerle. No cuando me trata como el tesoro más valioso que ha encontrado. Es fácil enamorarse de un hombre como él. Me salvó, y ahora dice que yo lo estoy salvando a él. Por otra parte, cuando hacemos un viaje a Paris para tramitar algunos de sus "negocios", empiezo a entender exactamente qué clase de tipo malo es: un ladrón de primera categoría. Tiene sentido. Después de todo, me ha robado el corazón.